Desde principios del año 2020, Haití ha visto cómo crecía el número de secuestros indiscriminados en su territorio. Hace apenas unos días, Estados Unidos confirmaba la desaparición de un total de 17 personas, 16 de ellos ciudadanos estadounidenses y uno canadiense, todos ellos misioneros en el terreno: el grupo, compuesto por doce adultos y cinco menores de edad, había sido secuestrado en Puerto Príncipe cuando viajaba en autobús después de visitar un orfanato. “Estamos buscando directrices de Dios para resolver esto, y las autoridades están buscando formas de ayudar”, indicaba en una nota la asociación Christian Aid Ministries, a la que pertenecen los raptados.
Según fuentes policiales consultadas por ‘The New York Times’, la banda que está detrás de este rapto se denomina ‘400 Mawozo’, una organización que controla el área donde desaparecieron los 17 misioneros y que ha venido sembrando el terror durante meses, tanto a base de secuestros como participando en combates armados en la calle. Es el mismo grupo que, según fuentes policiales, secuestró a principios de año a cinco sacerdotes y dos monjas, y también se cree que son los mismos que dieron muerte un famoso escultor, Anderson Belony, en su propia vivienda, uno de los santuarios vudú más antiguos y patrimonio familiar del pueblo, tal y como relata ‘Haiti Libre‘.
La banda, tal y como confirmó a la CNN un alto cargo del Gobierno de Haití, ha pedido un rescate de un millón de dólares por cada uno de los misioneros secuestrados, información que confirmó posteriormente el ministro de Justicia, Liszt Quitel. Quitel ha asegurado que tanto los equipos de negociación de la Policía como el FBI están asesorando al grupo misionero sobre cómo proceder, si bien el portavoz de la Casa Blanca, Jen Pskaki, ha reiterado que su política es “no negociar” con quien secuestra a sus ciudadanos, aunque ha asegurado que su objetivo es “traer a casa” a los 16 misioneros estadounidenses y al canadiense que han sido capturados en Haití. Entre los menores se encuentran un bebé de ocho meses, además de niños de tres, seis, trece y quince años, mientras que los adultos tienen entre 18 y 48 años.
¿Quiénes son los ‘400 Mawozo’?
El director del Centro de Análisis de Investigación en Derechos Humanos (CARDH) de Haití, Gédéon Jean, aseguraba al estadounidense ‘Washington Post’ que el ‘modus operandi’ de esta banda es “secuestrar vehículos y autobuses enteros” para luego pedir “un precio” para su liberación. ‘400 Mawozo’, que en criollo vendría a significar algo como ‘400 hombres sin experiencia’, es un grupo que usa la violación y el asesinato para mantener el control sobre las calles, sobre las empresas y sobre la gente con poder en el país caribeño. Tal y como recoge el ‘Post’, este grupo ha estado vinculado a procesos de extorsión, y podría estar detrás del creciente número de secuestros en el país, apuntando directamente al clero y a los miembros de congregaciones religiosas, una línea roja en la nación caribeña, de mayoría católica.
#Haiti: La @pnh_officiel a émis des avis de recherche à l’encontre de Joseph Wilson alias “Lanmò San jou” et de deux de ses lieutenants, qui sont en cavale suite à la première phase de l’opération visant à démanteler le gang “400 marozo”….👉https://t.co/m3tIrjJkZw pic.twitter.com/IbD1xHdHqS
— PNH (@pnh_officiel) December 28, 2020
Hace solo unos meses, la Policía de Haití publicó las imágenes de varios integrantes de la banda, entre ellos Joseph Wilson, alias ‘Lanmò San Jou’, prófugos desde el primer operativo lanzado por las autoridades para desmantelar a los ‘400 Mawozo’, acusados de intentos de asesinato, secuestros, robo de vehículos, secuestro de camiones de carga y otros delitos. ‘Lanmò San Jou’, el pseudónimo del supuesto líder de la banda, podría ser traducido del criollo como ‘La muerte no sabe qué día llegará’. Según el mismo diario, el ‘número dos’ de la banda, Joly ‘Yonyon’ Germine, está en prisión, y las autoridades de Haití están tratando de negociar con él.
El pasado mes de abril, la Policía haitiana tuvo que salir a negar los rumores relacionados con una supuesta liberación de ‘Yonyon’ Germine a cambio de tres de otros nueve religiosos secuestrados una semana antes. “Es una información falsa”, aseguró al ‘Gazette Haitï’ el portavoz de la Policía de Haití, Gary Desrosiers, después de que se conociera la liberación de tres de los raptados. Según el CARDH, de enero a septiembre de 2021 se han llevado a cabo 628 secuestros en Haití, entre ellos los de 29 ciudadanos extranjeros.
Mientras que históricamente las bandas de Haití han estado vinculadas con la política —eran usadas con fines como la supresión de votantes—, las más nuevas, como ‘400 Mawozo’, están llevando a cabo violaciones o reclutando niños, amén de los secuestros de figuras religiosas, hasta ahora intocables. “La violencia que sufren las familias ha alcanzado un nuevo nivel de horror, de abandono e indiferencia absoluta por parte de las autoridades encargadas de proteger la vida y propiedad de los ciudadnaos”, se puede leer en una petición lanzada para pedir el fin de la violencia de las bandas armadas de esta zona.
“Los bandidos, fuertemente armados, ya no están satisfechos con sus abusos, con el crimen organizado, con las amenazas o los secuestros para pedir rescates. Ahora los delincuentes irrumpen en las casas de las aldeas por las noches, atacan a las familias y violan a las mujeres, todo después de haber saqueado sus propiedades, acumuladas durante años de trabajo duro y honesto”, añaden.
Croix-des-Bouquets, ciudad fantasma bajo su control
Croix-des-Bouquets es uno de los suburbios de Puerto Príncipe que ha quedado bajo control de los ‘400 Mawozo’: en la actualidad se ha convertido en una ciudada casi fantasma, ya que muchos de sus habitantes han escapado de la violencia diaria en sus calles. En esta zona se concentraban muchos vendedores ambulantes, muchos de los cuales también fueron secuestrados u obligados a venderles todo lo que tuvieran para pagar rescates. Según las autoridades, las bandas controlan la mitad de la capital. Hace apenas unos meses tuvo lugar una fuga de la prisión que se encuentra en esta zona, de la que se ‘aprovechó’ uno de los más peligrosos capos de Haití.
Arnel Joseph, uno de los varios fugados tras un motín que se cobró ocho vidas (entre ellas la del director de la prisión), había sido detenido en julio de 2019 después de varios meses de persecución, y estaba a la espera de ser juzgado por homicidio y otros delitos. Joseph es uno de los principales cabecillas de bandas armadas del país.
source ‘400 Mawozo’: la banda detrás del secuestro de misioneros en Haití y que pide 17M$