El Gobierno ha modificado radicalmente el mapa de las sociedades de inversión de capital variable (sicavs), que en los últimos días, contrarreloj, mandaron hechos relevantes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La banca ha reportado cierres de entre el 74% y el 90% de las sociedades que tiene bajo su paraguas, según fuentes financieras.

Los asesores financieros y fiscales han apodado a este proceso como la gran liquidación. El Gobierno busca acabar con la figura de los ‘mariachis’, que son los accionistas puestos por el banco para llegar a 100, mínimo que deben tener las sicavs para tributar al 1% en vez de al 25%. Ahora, solo se contabilizarán los accionistas con, al menos, 2.500 euros invertidos. Pero la nueva norma deja una ventana de cierre sin tributar si se liquida la sociedad este año y se reinvierte el capital en otra institución de inversión colectiva (IIC) como fondos de inversión.

De esta forma, la mayor parte de las sicavs está apostando por la liquidación y reinversión. En primera instancia lo harán a fondos españoles, pero en seguida podrán traspasarse a vehículos luxemburgueses, que son los que se suelen usar en banca privada. En la industria se da por hecho una salida de dinero a fondos domiciliados en Luxemburgo de en torno a 20.000 millones.

Hacienda podrá vigilar que las sicavs cumplan el nuevo criterio para la tributación por Sociedades, pero la CNMV seguirá supervisando a estas sociedades. El organismo pidió a las gestoras que informaran del cambio a las sicavs, e instó a que comunicaran cualquier cambio en un hecho relevante hasta el 31 de enero, este lunes, y modificaran el folleto en caso de continuar antes de esa fecha.

Así lo han hecho. Aunque en general, las sicavs apuestan por cerrar, las 10 más grandes continuarán. De hecho, a la cabeza del ranking ha habido un sorpaso, según los registros a cierre de diciembre de la CNMV. El empresario Alberto Palatchi, ex dueño de Pronovias, fusionó en diciembre sus dos sicavs. La resultante es Gesprinsa Inversiones, gestionada por Santander Private Banking, que acabó diciembre con 990 millones de patrimonio, más que ninguna otra sicav española.

La sicav dice en su folleto que tributará al 1%, lo que implica que contará, al menos, con 100 accionistas que tengan cada uno de ellos 2.500 euros o más invertidos. A 31 de diciembre, la sicav tenía 342 accionistas, con accionistas significativos que tenían el 94,5% del patrimonio.

El vehículo de Palatchi ha sobrepasado en tamaño a Torrenova, históricamente la mayor sicav española, que es de Banca March pero con un carácter abierto, y que tributará sin ninguna dificultad al 1% con el nuevo régimen. Al acabar 2021, tenía 954 millones de euros de 4.364 accionistas. Otra sicav del ‘top ten’, aunque lejos de los anteriores, es Bellvert, también de los March y también cumplirá con los requisitos que entraron en vigor el 1 de enero, con un patrimonio de 361 millones de 2.542 accionistas.

La tercera sicav más grande es Morinvest, de Alicia Koplowitz, y gestionada por BBVA. No ha cumplido con la petición de la CNMV y aún no ha informado sobre sus intenciones. La CNMV actualizó de oficio el folleto por información recibida en el segundo semestre, en torno a riesgos de inversión, y ya aparece el mensaje de advertencia del cambio fiscal que han tenido que incorporar todas las sicavs. Pero ni hay hecho relevante ni hay especificación en el folleto de a qué tipo impositivo tiene previsto la sociedad tributar. A 31 de diciembre, contaba con 583 millones de patrimonio y 131 accionistas, pero uno de ellos, la propia Alicia Koplowitz, tenía el 99,83% o 581,671 millones. Es decir, había 130 accionistas con algo menos de un millón en total, o un promedio de 7.600 euros cada uno.

Entre las más grandes también hay dos sicavs de la familia Del Pino, gestionadas por la gestora Pactio, que tiene seis sociedades de la familia. Las dos más grandes son Allocation y Chart Inversiones, con 453 millones de 217 accionistas y 403 millones de 212 accionistas respectivamente. En la primera hay un accionista con el 98,92% del capital, y en la segunda, uno con el 99,67%. En ambos casos, el nuevo folleto dice que “la sicav considera que podrá cumplir los requisitos indicados en el apartado (i) anterior para tributar al 1%. No obstante, existe el riesgo de que por razones sobrevenidas la SICAV tuviera que tributar al tipo general del Impuesto sobre Sociedades”.

Entre las 10 sociedades más grandes también está Soixa Sicav, gestionada por Magallanes, y que ya anunció la semana pasada que continuará como sicav y tributando al 1%. Cuenta con 377 millones de patrimonio de 275 accionistas, pero ninguno de ellos sobrepasa el 20% de los activos.

Asimismo, las sicavs de Sandra Ortega, bajo el paraguas de JP Morgan, tributarán al 25%. Así lo comunican en sus nuevos folletos. Soandres de Activos cuenta con 255 millones de 106 accionistas, y Breixo Inversiones tiene 215 millones de 107 accionistas. En los dos casos, Ortega cuenta con el 99,99% del patrimonio. El nuevo folleto, en ambos casos, dice que “el tipo aplicable en el Impuesto de Sociedades es el 25% (tipo general)”. El fin de los ‘mariachis’ elevará así la tributación del vehículo de Sandra Ortega del 1% al 25%.

Entre las 10 primeras sicavs, después de la fusión de las dos sociedades de Palatchi, pasa a estar Arbarin, de Juan Abelló, con 242 millones de 223 accionistas, uno de ellos con el 87,98% del patrimonio. La sicav, gestionada por la banca privada de Santander, tributará al 1%, aunque el folleto advierte de que “existe el riesgo de que por razones sobrevenidas la sicav pudiera tener que tributar al tipo general del Impuesto sobre Sociedades”.

source El nuevo mapa de las sicavs: del sorpaso de Palatchi a March al enigma de Koplowitz