Hasta ahora, escaseaban los microchips, el gas o el petróleo. Ahora, también el silicio. Un metal que nunca se pensó que fuera a poner en peligro la cadena de suministro global y cuya presencia es fundamental en los chips de ordenador, hormigón, vidrio, o hasta en las piezas de un automóvil.

¿El responsable? China, el mayor fabricante de silicio del mundo, quien ha recortado su producción en aras de cumplir con sus objetivos de disminuir su consumo de energía. Por tanto, el descenso de la oferta ha conllevado un aumento de su precio de en torno a un 300% en menos de dos meses, tal y como informa Bloomberg.

Esta situación, unida a los problemas ya existentes de crisis de las materias primas y al encarecimiento de hasta un 328% del transporte marítimo, complica aún más el buen funcionamiento de las cadenas de suministro a nivel global.

Escaladas de precio de hasta el 28% en lo que va de año se veían este martes en los futuros del algodón. Y de casi un 40% en el caso de la madera desde finales de agosto. También otros metales como el cobre o el aluminio no han dejado de subir el último año.

Y el petróleo no ha quedado lejos. Este martes, el barril de crudo del Mar del Norte alcanzaba los 80 dólares por primera vez en tres años. Una subida que se ha ido corrigiendo con los días y que esta jornada, tras la apertura de Wall Street, ronda los 78 dólares por barril. El de referencia en Estados Unidos, los 74,6.

Aunque lo cierto es que algunas industrias sufren más que otras. Las consecuencias también son especialmente alarmantes para los fabricantes de automóviles, donde el silicio se alea con el aluminio para fabricar bloques de motor y otras piezas.

La patronal europea de proveedores automovilísticos (Clepa) cifraba el retraso en la producción en más de medio millón de vehículos por escasez de componentes. La falta de silicio, que se usa junto al aluminio para fabricar motores y otras piezas automóviles, no augura que las previsiones mejoren a corto plazo.

En España, las estimaciones de producción de fabricantes como Mercedes Benz ya se han modificado a la baja por problemas de suministro que han obligado a parar los talleres de Mercedes Benz, Stellantis, Ford u Opel, entre otros. Y a la escasez de microchips, ahora se suma la del aluminio.

Según los datos publicados este viernes por las asociaciones de fabricantes, las matriculaciones en septiembre han caído casi un 16% interanual.

source El silicio sube un 300% y enciende las alarmas del sector del automóvil hasta el ‘tech’