Cuatro personas crearon historia después de que saltaron al Océano Atlántico frente a la costa de Florida a bordo de una cápsula SpaceX. Se convirtieron en la primera tripulación orbital totalmente civil del mundo en visitar la órbita de la Tierra. Permanecieron allí durante tres días sin ningún astronauta profesional con ellos y ahora han aterrizado de nuevo en la Tierra. El multimillonario Jared Isaacman, quien también resultó ser el comandante de la misión de “Inspiration4”, agradeció a SpaceX por hacer que esto sucediera. “Fue un gran viaje para los cuatro. Muchas gracias SpaceX ”, dijo Isaacman durante la transmisión en vivo de la compañía. Se mostró a la tripulación viendo películas durante su estadía de tres días en el espacio. También se les escuchó ocasionalmente responder al control de la misión desde el interior de la nave espacial totalmente automatizada. Después de la estancia, vino la parte más peligrosa de volver a entrar en la atmósfera de la Tierra. Durante su viaje de regreso, viajaron a una velocidad de más de 17,000 millas por hora. La nave espacial trató de reducir la velocidad utilizando la gruesa capa de aire. Durante este proceso, la temperatura exterior de la nave espacial alcanzó los 3500 grados Fahrenheit. La cápsula en la que viajaba la tripulación ha sido diseñada para no permitir que la temperatura interior supere los 85 grados Fahrenheit. El escudo térmico dentro de la cabina protegió a la tripulación del intenso calor y la acumulación de plasma.

Después de salir de la nave espacial, se vio a los miembros de la tripulación sonriendo y saludando a las cámaras de transmisión en vivo. Fueron llevados de regreso a Florida en helicóptero. La tripulación ha aterrizado pero el vuelo no ha sido del todo perfecto desde el punto de vista técnico. Benji Reed, director de gestión de la misión de la tripulación de SpaceX, dijo que había varios problemas en los que trabajamos. “Hubo ciertos problemas en los que la empresa intentó trabajar. Trabajamos en el Sistema de Gestión de Residuos. Pero esto está perfectamente bien. Y sabes que nuestra tripulación estaba feliz y saludable ”, se escuchó decir a Reed durante una sesión informativa posterior al vuelo. Todd Ericson, director de la misión Inspiration4, aclaró que el problema solo estaba relacionado con el ventilador del sistema de gestión de residuos. Ericson dijo que el equipo de SpaceX solucionó el problema implementando un “plan de respaldo”. “Me quito el sombrero ante el equipo por hacer un trabajo excepcional”, dijo Ericson. Sin embargo, Reed dijo que un sensor de temperatura de los propulsores Draco también enfrentaba un problema. Los propulsores Draco tienen un solo uso y es mover la cápsula en el espacio exterior. Cuando se dedujo el problema, la empresa respondió desconectando el sensor “doble redundante”. “El propio Draco era redundante y, por lo tanto, nunca supuso una amenaza”, dijo Reed.

La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio, sin embargo, dijo que el Crew Dragon desarrollado por SpaceX es hasta ahora el vehículo tripulado más seguro que jamás haya volado. Hay muchos otros que confían completamente en Crew Dragon, ya que ya tiene dos viajes exitosos a su nombre. Durante estos dos viajes, había astronautas profesionales a bordo. Pero este viaje fue diferente en muchos aspectos, ya que fue la primera vez que ninguno de los miembros de la tripulación a bordo de la nave espacial era astronauta. El viaje fue financiado únicamente por Isaacman, de 38 años, quien facturó el viaje como una recaudación de fondos para el Hospital de Investigación Infantil St. Jude. La otra cosa notable es que los miembros de la tripulación no se quedaron en la Estación Espacial Internacional bajo la guía de astronautas. También hay otros turistas que viajaron a la órbita pero todos lo hicieron bajo la tutela de astronautas profesionales. Pero esta vez todos los miembros de la tripulación permanecieron dentro de su cápsula de 13 pies de ancho. Volaban libremente alrededor de la tierra a una altitud de 350 millas. Curiosamente, esta es la primera vez que los humanos alcanzan esta altura. La tripulación estaba casi 100 millas más alta que donde está la Estación Espacial Internacional. Mientras estaban en el espacio, los miembros de la tripulación también realizaron algunas investigaciones científicas. Esto incluyó cómo responden sus cuerpos al estar en el espacio. También pasaron tiempo mirando por una gran ventana en forma de cúpula llamada “cúpula”.