La goleada en el Etihad esconde, en realidad, algo que, por tardío no era menos esperado. A este Real Madrid se le pasó la fecha de caducidad. Sin restarle un ápice de mérito ni de brillantez es hora de poner sobre la mesa las deficiencias de una plantilla desequilibrada que ha rendido por encima de sus posibilidades gracias a la gestión del entrenador, Carlo Ancelotti, en las dos últimas temporadas. Y a la hora de analizar ese futuro inmediato, lo mejor es hacerlo por líneas y por nombres, empezando por el banquillo.
Ancelotti tiene la palabra
Carlo Ancelotti tiene un año más de contrato. Lo sabe él y lo sabe Florentino Pérez, que hace quince días, después de ganar la Copa (siempre tras ganar títulos) advirtió que no hay un técnico mejor para el Madrid. Pero la realidad es que hay dudas sobre la continuidad del italiano. Y las hay porque después del empate ante el Atlético que supuso el adiós definitivo a la Liga y la derrota en la ida de las semifinales de la Copa con el Barça en el Bernabéu, el presidente sondeó la situación de Mauricio Pochettino, técnico que siempre ha querido fichar para el Madrid. Pero Carletto ha enderezado el rumbo y Pochettino se ha comprometido con el Chelsea.
Así que el problema ahora sería elegir un sustituto para Carlo. Surgen los nombres de Zinedine Zidane, que está libre y volvería seguro, y el de un José Mourinho que gusta a Florentino para reconstruir la plantilla y sacarle el máximo rendimiento. Entre los ‘outsiders’ aparecen Xabi Alonso (gran temporada la suya en el Bayer Leverkusen), un Raúl que se irá del Castilla a entrenar fuera, y un Álvaro Arbeloa al que promueven con insistencia desde dentro de la Casa Blanca, pero no convence a Florentino. La realidad es que salvo que Carletto decida irse a dirigir a Brasil, a día de hoy el italiano es el hombre que dirigirá el Real Madrid la próxima temporada, por más que al presidente le aburra ver siempre la misma cara en el banquillo.
Refuerzos para los laterales
El Madrid tiene serios problemas estructurales atrás. Los laterales son una sangría, como se demostró en Manchester. En la derecha Dani Carvajal ya ha jugado sus mejores partidos y Lucas Vázquez es una solución de urgencia que cumple en Liga, pero en los partidos exigentes se le notan las deficiencias. En la izquierda, Ferland Mendy lleva media temporada lesionado y a Nacho, Ancelotti no le da oportunidades por más que cada vez que salga cumpla de sobra. Cabe recordar el partido que hizo en Anfield anulando a Salah tras suplir al lesionado David Alaba.
El austriaco no da la talla defensivamente ni como lateral ni como central. Aporta salida y tiene jerarquía, pero sufre defendiendo y no termina de mandar en la línea. El partido ante el City es un buen ejemplo. No ayudó como debía a Eduardo Camavinga y desordenó a Éder Militao. El brasileño necesita un macho alfa junto a él, alguien que le hable y le ordene. Y en eso Nacho es el zaguero con más personalidad del equipo. Antonio Rüdiger es un central físico, con mucho compromiso y un alto grado de concentración, pero no tiene calidad para sacarla desde atrás. Los blancos ficharán un lateral y si sale Nacho deberían contratar otro central. Jesús Vallejo y Álvaro Odriozola tienen un rol residual. Entre los laterales que ha sondeado el Madrid aparecen Alphonso Davies y Reece James.
Bellingham y la duda de Ceballos
Toni Kroos y Luka Modric van a renovar otro año, pero su rol debe cambiar. Deben seleccionar mejor los esfuerzos y no jugar juntos los partidos de rango porque eso penaliza al equipo, como ocurrió ante el City. Camavinga debe jugar en su posición, la de 5, donde su exuberancia física le permite brillar y equilibrar el equipo. Ha explotado este año y debe convertirse en el Casemiro de la próxima década. Aurélien Tchouaméni ha sufrido un bajón preocupante tras el Mundial, pero debido a su juventud e inexperiencia tendrá un periodo de adaptación porque el Madrid le necesita.
Dani Ceballos está más fuera que dentro. Pareció hacerse con un rol protagonista a mitad de temporada, pero cuando han llegado los partidos grandes ha desaparecido del equipo. Tiene pocas posibilidades de renovar porque se le está poniendo cara de Isco. Habrá fichajes, como el de Jude Bellingham, que asumirá el rol de creador en la medular, y no es descartable que llegue otro. Se ha hecho una oferta de 30 millones por Gabri Veiga, pero con la idea de cederlo a un equipo que juegue en Europa y recuperarlo la siguiente temporada, tras la marcha definitiva de Kroos y Modric.
El plantón de Mbappé sigue coleando
El puesto más abandonado desde hace mucho. Entre el plantón de Kylian Mbappé, el majestuoso año anterior de un Benzema que nunca quiso que le fichasen un sustituto, y la continuidad del futbolista más improductivo de la historia del Real Madrid (Mariano), la delantera es un erial. El único referente es Karim Benzema, que se ha sabido reciclar en goleador sin perder su esencia, pero que a sus 35 años ya no ofrece las prestaciones necesarias. Este año suma 30 goles, pero no ha aparecido cuando el equipo más lo necesitaba.
El Real Madrid necesita ahora un 9 que se gane la titularidad o al menos genere competencia a un Benzema crepuscular. El presidente sigue pensando en Mbappé, pero hasta que llegue necesita fichar un especialista del gol, un 9 de área, a poder ser. Vinicius y Rodrygo garantizan el desequilibrio y la llegada al área desde la segunda línea. Fede Valverde es un comodín que este año estalló ofensivamente en la primera mitad con una docena de goles y Marco Asensio es el otro jugador que ha aportado pegada, pero no está nada claro que vaya a renovar porque sabe que no tiene sitio en el once con los brasileños y el 9 que esté, sea Benzema, Mbappé o el que venga.
De Eden Hazard mejor ni hablar y lo de Mariano Díaz resulta incalificable. Necesita fichar un 9 de entidad, subir al Toro Rodríguez y limpiar la plantilla de ‘Marianos’ y ‘Hazards’. Con Christopher Nkunku cerrado por el Chelsea y Erling Haaland bloqueado por el City, los blancos han tanteado a jugadores como Victor Osimhen y Roberto Firmino y les han ofrecido a Dusan Vlahovic. Quien se incorporará seguro es Endrick, que llegará al Madrid en 2024, tras cumplir los 18 años.
Enlace de origen : La renovación pendiente del Real Madrid: Bellingham, Osimhen, Veiga, James, Davies... y Ancelotti