Según informa el Diario de Ibiza, un hombre de 58 años, nacido en los Países Bajos y residente en la isla de Ibiza, ha muerto tras consumir veneno de sapo bufo. Fueron los agentes de la Guardia Civil quienes encontraron el cadáver el pasado 23 de abril en una zona boscosa de Rosa Lisa, en el municipio de Santa Eulària.
En un primer momento se desconocía las causas del fallecimiento, pero el estudio forense del Instituto de Medicina Legal de Ibiza ha determinado que la causa de la muerte fue la ingesta que genera el veneo del sapo bufo.
Aunque este tipo de muertes está íntimamente relacionadas con rituales comunitarios, que saltaron en la fama al involucrar (aunque ya exculpado) al exactor de cine para adultos Nacho Vidal, todo apunta que en este caso el hombre fallecido se encontraba solo.
¿En qué consiste el rito del sapo bufo?
Bufo es un género de anfibios anuros de la familia Bufonidade, que incluye a la especie sapo europeo.
Está presente en norte de África, Oriente Medio, Japón, sudeste asiático y Eurasia. Se caracterizan por tener una form achaparrada y patas cortas. Como curiosidad, carecen de cola, dientes y tienen pupilas horizontales. La piel es gruesa, seca y verrugosa.
En España, el sapo de Gredos (Bufo bufo gredoscola), que se limita a la Sierra de Gredos, en el centro peninsular, se considera como un sinónimo del Bufo spinous. También es venenoso, aunque este tipo de especies presentes en nuestro país son poco tóxicas.
El rito del sapo bufo, cuyo origen se ubica en México, donde es muy popular, consiste en fumar bufotenina, que es el veneno que se extrae del sapo bufo alvarius, que es su nombre cientifico. Se trata de uno de los alucinógenos más potentes que se encuentran en la naturaleza, y que también está presente en otros anfibios, algunas plantas y setas.
Para extraer el veneno del sapo bufo hay que presionar sus cuatro glándulas cutáneas.
La bufotenina se encuentra solo en una de las 463 variedades del sapo que existen en el mundo, el bufo alvarius.
Tiene una actividad alucinógena similar a la que pueden producir otras sustancias tóxicas como la ayahuasca (se utiliza en ritos para ‘desintoxicarte’ de las cosas que no te hacen feliz) o la mescalina (veneno que se extrae de dos tipos de cactus).
No obstante, sus efectos son más intensos que lo de estos tóxicos mencionados anteriormente. El sapo bufo produce síntomas más inmediatos y, sobre todo, más peligrosos para nuestro organismo.
En concreto, la sustancia que contiene el anfibio se llama 5-MeO-DMT, que es una droga que se comercializa en la deep web (Internet oculto y profundo) y que se ha extendido como la pólvora por todos los rincones del mundo.
¿Cuáles son los efectos de este veneno?
El consumo de este veneno produce un ‘viaje’ que suele durar entre 15 y 20 minutos. Y tiene importantes efectos sobre nuestra salud:
- Taquicardia
- Pérdida del conocimiento
- Alucionaciones
- Y, en el peor de los casos, la muerte.
La explicación es que las secreciones del Bufo bufo contienen bufadienólidos, que son unas sustancias cardiotóxicas que tienen un efecto parecido al del fármaco digoxina, que se utiliza para tratar la insuficiencia cardíaca y las arritmias pero que en sobredosis puede causar el fallecimiento por parada cardiorrespiratoria.
Para una sobredosis por este medicamento sí existe un antídoto, denominado anticuerpos antidigoxina, aunque en la actualidad no se dispone de tratamiento específico para la toxicidad por la bufotenina.
En los países sudamericanos, donde se utiliza en rituales chamánicos con bastante frecuencia, los chamanes lo usan como tratamiento para las adicciones o trastornos de salud mental como la depresión. Pero la realidad es que todas estas aplicaciones no tienen ningún fundamento científico.
Mortal también con los perros
La doctora María Rosario Moyano, de la Facultad de Veterinaria, explica en un artículo publicado en la Revista Electrónica de Veterinaria que los animales que más se ven afectados por este tipo de intoxicaciones son los perros.
- “Al mantener los sapos en la boca se estimula la liberación de toxinas desde la glándula parótida hacia la cavidad bucal”.
En este caso, los síntomas aparecen a los 15 minutos del contacto con el sapo. Lo primero que se debe hacer es lavar con abundante agua, solo si el perro está consciente, y si se ha intoxicado la sintomatología es que presente convulsiones, arritmias e incluso signos de shock.
Por ello, es importante estar pendiente de todo lo que se lleva el perro a la boca, vigilar su sintomatología y acudir con la mayor celeridad posible a un veterinario ante la mínima sospecha.
Si no responde al tratamiento, el animal fallecerá a las tres horas de la intoxicación.
Enlace de origen : Veneno del sapo bufo: así es el peligroso alucinógeno que ha matado a un hombre en Ibiza